10.6.22

Crucificado Estoy

Estar crucificado quiere decir morir a mi deseo natural de recibir crédito y honor. Sin embargo no significa que mi responsabilidad muere, todo lo contrario, sigo siendo responsable de mis actos. 


Sí hago lo malo, sólo yo soy responsable.

Pero si hago lo bueno, Dios se lleva todo el crédito.

Esto es porque incluso lo bueno que hago se da porque Él opera a través de mí. Entonces yo no recibo crédito por nada.

Esta idea es 100% ofensiva y absurda para la mente natural y humanista.

Pero para la mente renovada, nuestra satisfacción no está en recibir crédito; está en que Él lo reciba.