(Lectura extensa, favor leer completo antes de responder)
Pensé y reflexioné antes de reaccionar ante la controversia que ya todos
conocen, y pues, aquí coloco mi opinión, dividido en tópicos.
1) LA PIEZA
Vi el material que ha causado tanto furor. Bueno, vi sólo la mitad,
porque es tan malo que no aguanté. Y me refiero a que es malo *como
comedia y como pieza de entretenimiento*.
El mejor chiste que vi
quizás califica como un 2/10 (siendo generoso), y sólo recuerdo un
chiste que llegara a esa consideración. Es como una imitación barata de
Monty Python, pero en vez de dar risa, da pena.
De verdad quería
verlo completo para poder hablar con toda propiedad. Pienso que vi lo
suficiente para entender el material… Pero es que es tan MALO, lo tuve
que apagar.
Ahora mismo estoy leyendo dos libros, tomando tres
clases, todo esto aparte de mis rutinas de trabajo, de familia y
ministeriales. Dedicarle 23 minutos de mi atención a una cosa tan mala
fue más que generoso.
“La Última Tentación de Cristo” de Scorcese
también fue malísima, pero por lo menos tuvo buena cinematografía,
dirección y musicalización.
Mi recomendación sería que nadie pierda su tiempo.
2) EL CONTENIDO
De más está decir que el guión fue escrito por personas sin ninguna
reverencia ni temor de Dios, con mentes depravadas, pero esto no debe
sorprender a nadie. La gran mayoría de la tal llamada "industria del
entretenimiento" va por esta onda.
Mi teoría es que este equipo
de "comedia" es tan fallido que tuvieron que hacer una pieza provocativa
para que alguien les prestara atención. O quizás no son tan
inteligentes. Tal vez tiraron patadas voladoras, metieron chistes
gastados y con poca inteligencia en una licuadora, y llegaron a este
disparate por accidente.
El contenido se burla de nuestra fe y de
Dios… Lo mismo que han venido haciendo por más de 2,000 años, lo mismo
que hace la música y la TV de hoy… Y aunque a nuestros primeros
antepasados los encendieron como antorchas para iluminar las plácidas
caminatas de Nerón, aquí estamos.
Nada nuevo.
3) LAS REACCIONES
De antemano debo decir que nadie está obligado a suscribirse a nada. Si
usted se quiere suscribir a algo, bien. Y si no, también. Viva la
libertad.
Dicho esto, veo que la mayoría de las personas está
cancelando su suscripción para tratar de hacer un boicot o de "enviar un
mensaje," lo cual me parece una reacción un poco exagerada.
Netflix tiene contenido horrible (Jessica Jones, ugh), contenido que no
va con nuestra cosmovisión (la mayoría de su catálogo), películas que
ridiculizan nuestra fe (confieso que aquí estoy pensando en el "Left
Behind" de Nicholas Cage) pero también tiene contenido muy bueno que al
parecer mis hermanos en la fe nunca descubrieron porque nunca hablan
acerca de eso.
Como ejemplo, tienen películas de 3+ horas de
duración acerca de cada uno de los evangelios, películas cristianas pop
como "God's Not Dead" y "The Case For Christ", y piezas que todo
cristiano debería ver como "The Heart of Man" (que lamentablemente me
acabo de dar cuenta de que quitaron del catálogo en los EEUU, pero yo ya
se los había recomendado).
¿Cuál es el punto de todo esto?
Netflix no es un sólo contenido, es un catálogo que le permite a usted
elegir lo que usted quiere y no quiere ver.
De nuevo, usted no
está obligado a suscribirse, y respeto la decisión de cualquier persona
que decida cancelar su suscripción. Pero si quieren ser consistentes,
jamás pueden ver nada de YouTube porque tiene toda gama de contenido en
contra de nuestra fe. No pueden abrir su navegador porque existen sitios
web que atacan la fe Cristiana. No pueden siquiera leer esto, porque
Facebook también tiene contenido ateo y anti-religioso. Cierren también
su cuenta de Spotify porque tienen música de Marduk y de Gorgoroth.
Me dirán que la gran diferencia es que con Netflix se paga suscripción y
los otros ejemplos no. Pues en estos ejemplos, usted paga con *su
atención*, que es la moneda más valiosa de nuestros tiempos. Esos
canales les venden su atención a los anunciantes, y se lucran a través
de esta transacción.
Y entonces volvemos al punto. ¿Están mis
hermanos en la fe dispuestos a ser consistentes y aislarse de *todo*
medio de entretenimiento, sólo porque colocan contenido que atenta
contra nuestra fe?
4) EL BOICOT
Aprecio el corazón detrás
del boicot, de verdad que sí. Y siento que tengo que repetir que
respeto la libertad de cada persona para hacer lo que desee.
Pienso que el boicot no creará el impacto que se busca, y al contrario,
le rinde atención a una pieza blasfema, pero sobre todo MALA. Si no
fuera por su boicot, yo no hubiera perdido 23 minutos de mi vida viendo
esa porquería, porque ni me hubiera enterado.
Como en todo,
pienso que harían más bien promoviendo materiales buenos, y no haciendo
protestas por los materiales malos, porque de verdad, no terminaríamos
nunca. En vez de ver mensajes de cancelación de Netflix y de rabia, yo
quisiera que mis hermanos me recomendaran un buen libro, que me refieran
a un nuevo comentario bíblico, que me compartieran un buen debate. En
fin, que hicieran más señal y menos ruido.
Dicho esto, entiendo
que existe un tiempo y un lugar apropiado para las protestas y boicots.
Mi sincera opinión es que este no es uno de ellos. De todo lo que
debiéramos estar ocupando nuestra atención, una comedia de esta índole
no es siquiera lo último de la lista.
5) LA POSTURA
En este tópico trataré de resumir la cosmovisión Cristiana con respecto a estos temas.
Nuestro llamado como Cristianos no es hacer un mundo mejor. Por
supuesto que como resultado de practicar nuestra fe (dije PRACTICAR
NUESTRA FE, no ritos religiosos), entendemos que resultaría en el mejor
mundo posible. Pero este no es el fin que buscamos.
Nuestro
objetivo no debería ser censurar ni entretenernos respondiendo a las
estupideces de una mente depravada. Proverbios 26:4 dice que no debemos
responder al necio según su necedad, pues nos hacemos como ellos. Es
absolutamente natural que el hombre natural actúe como tal. Y
francamente, estar en un tira y jala por una pieza satírica (y MALA) es
como revolcarse en el lodo con los cerdos. El cerdo muerto de la
alegría, y tú todo sucio.
Si fuera una pieza seria, estudiada, y
sobre todo sincera, entonces obedeceríamos a 1 Pedro 3:15-16 y
responderíamos con respeto y mansedumbre. Pero las mofas de niños se
ignoran.
Nuestro llamado es hacia predicar, hablar y representar
las buenas nuevas de Cristo, porque de otro modo, ¿cómo invocarán y
creerán? (Romanos 10:14). Todos caímos cortos, somos pecadores en un
caudal hacia la muerte eterna, pero Él dio su vida en sacrificio por
nosotros, pagando el castigo que nosotros merecíamos, para que todo el
que crea en Él en arrepentimiento y fe reciba perdón, relación,
identidad, y vida eterna.
La oscuridad se desvanece con la luz, no con manotazos. La mentira se desvanece con la verdad, no con mordazas.
A nosotros no nos debe interesar convertir gente mala en gente buena.
Un Netflix limpio no avanza el Reino de Dios ni una centésima de
milímetro.
Nuestro Rey Jesucristo vino a resucitar a los muertos y
a liberar a los cautivos. ¿Qué estamos haciendo para compartir estas
buenas noticias?